Las costumbres y tradiciones antiguas son muy difíciles de cambiar, pero aunque estén muy arraigadas puede hacerse si es que hay un buen motivo para ello. Por ejemplo, Busiris, el rey de Egipto que mandaba que fueran ahogados en el Nilo todos los extranjeros que llegaban a sus dominios, acabó con esa práctica bárbara y cruel cuando conoció a su tercera esposa, que era persa.
1 comentario:
He aquí un hermoso ejemplo de la transformación que puede obrar el amor. Lo de Alex de la Iglesia (te refieres a su fina estampa actual) seguro que es por obra de alguna sílfide.
Me ha gustado mucho éste cuento.
Saludos.
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