En el lejano país de hielo las palabras que se pronuncian en voz alta se congelan en el aire y sólo pueden oírse si se las calienta con una llama, para que se descongelen.
Hola Víctor. Me ha gustado esta entrada. Un poco fría, pero muy estética. Me he reído mucho, sin embargo, con el mono de Cartagena. Así que eres escritor. Bueno, ya somos dos.
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Hola Víctor. Me ha gustado esta entrada. Un poco fría, pero muy estética.
Me he reído mucho, sin embargo, con el mono de Cartagena.
Así que eres escritor. Bueno, ya somos dos.
Saludos.
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